Su lenta velocidad de recarga hacía que los nativos pudieran lanzar 20 flechas por cada disparo de los hispanos
Representación de la fundación de la actual Santiago de Chile por los conquistadores. Pedro Lira (1888) |
Al hablar de la conquista de América es inevitable que acudan a la mente una serie de imágenes recurrentes. En ellas, se suele ver a los españoles ataviados con coraza y morrión mientras avanzan valientemente por la selva con sus armas de fuego en ristre. Sin embargo, y aunque este retrato es en gran medida cierto, la realidad es que los arcabuces utilizados por los hispanospara la colonización no se usaron mucho en el continente durante el SXV y el SXVI debido a su alto precio y a la gran cantidad de tiempo que se necesitaba para recargarlo –algo que provocaba que, por cada bala disparada por un castellano, un nativo lanzara más de 20 flechas contra él-.