La dieta de los neandertales estaba supeditada a lo que ofrecía el entorno
Recreación de un grupo de neandertales |
La dieta de los neandertales la conocemos, en gran parte, gracias al estudio de los restos fósiles que se han ido encontrando, a lo largo del tiempo, en los yacimientos de toda Europa. Estos fósiles han ayudado a descifrar cuál era el estilo de vida de estos homínidos y cómo se alimentaban. Los investigadores han examinado el material genético de varios individuos para identificar qué comían y cuál era su dieta, que variaba dependiendo del lugar de procedencia de los restos analizados.
Por una parte, los inquilinos que habitaron en la cueva del Sidrón, situada en el concejo de Piloña en Asturias, incorporaron a su dieta vegetales como las setas, semillas como los piñones y musgo pero no se aprecia una dieta plenamente carnívora como se pensaba anteriormente. Sin embargo, los restos de un individuo encontrado en la cueva de Spy en Bélgica, conocido como Spy II, atestiguan que su dieta era rica en carne y que ingirió grandes animales como rinocerontes y muflones. Se sabe lo que comía gracias al estudio de la placa dental calcificada de este sujeto, que han llevado a cabo los investigadores, en la que se ha hallado ADN de estos grandes animales.
En los yacimientos franceses de Les Cottés y Grotte du Renne han aparecido restos fósiles de otros individuos que nos indican que su alimentación era puramente carnívora, basada en grandes herbívoros como renos y caballos, ya que junto a los fósiles de estos neandertales, han aparecido restos de estos mamíferos. Al parecer, las plantas y los vegetales no formaban parte de su alimentación de forma asidua o la ingerían en pequeñas proporciones, es decir, no gozaban de una dieta omnívora.
En el yacimiento francés de Saint-Césaire se llegó a la conclusión que la dieta del hombre de Neandertal era básicamente carnívora aunque éstos sí incorporaron a su alimentación el pescado, pero en pequeñas cantidades. Los vegetales quedaban relegados al último puesto donde el porcentaje de ingesta era casi nulo. Sin embargo, los neandertales que habitaron en las cuevas de Vanguard y Gorham en Gibraltar aprovecharon el alimento que les proporcionaba el medio desde crías de focas, hasta cetáceos varados que les traía la marea.
Hay otros descubrimientos que alteran esta visión tan carnívora de los neandertales como es el caso del individuo encontrado en la cueva de Shanidar situada en los montes Zagros. Hay evidencias claras de que este sujeto, al igual que el analizado en la cueva del Sidrón, tenía una dieta más variada y comía vegetales ya que en la placa dental calcificada se han encontrado microfósiles de plantas, carne y moluscos como los caracoles.
Cierto es, que la dieta de los neandertales estaba supeditada a lo que ofrecía el entorno, y que variaba dependiendo de las condiciones climáticas en las que vivían, por eso los individuos que habitaban en climas más fríos tenían una dieta rica en carne y los que residían en climas más cálidos disfrutaban de una alimentación más variada.
¡Si te gusta Antrophistoria, no olvides seguirnos en nuestras Redes Sociales!
Autoría| Rosa Mª Huertas Franco
Imagen| La Voz de Asturias
Más información: Revista Antrophistoria
Comentarios