No era un juego lúdico, más bien todo lo contrario, tenía un carácter ritual
La religión en Mesoamérica era un rasgo cultural inherente en todas las
fases de la vida de cualquier individuo y como tal, muchas de las cuestiones
que se planteaban eran respondidas a través de mitos cosmogónicos donde estaban
presentes los dioses y los chamanes, que eran los intermediarios de éstos en la
tierra.
La sociedad era puramente teocrática así que sus actividades y juegos también
se veían fuertemente influidos por la religión.
Tanto es así que se empezó a jugar a lo que se conoce como ulama, este
término hace referencia al juego en sí pero es más conocido por el nombre de la
cancha tlachtli. En el juego de pelota había dos equipos y éste se llevaba a cabo en
una cancha realizada en piedra con una estructura en forma de H o de doble T
bastante alargada, flanqueada en la parte más estrecha por unos muros bajos o
por grandes construcciones, dependiendo de la zona donde se encontrara.
En el centro de esos grandes muros se colocaban dos aros de piedra en
posición vertical y por ahí debían de introducir una pelota de hule endurecido.
Al ser un material tan resistente, los jugadores estaban ataviados con
protectores en la zona de la cadera, las rodillas, etc. Ya que a la pelota sólo
podían golpearla con las articulaciones, caderas y piernas y además, estaba
totalmente prohibido tocarla con las manos o que cayera al suelo.
Al parecer, el juego de la pelota, era un juego de carácter religioso ya
que encarnaba un acontecimiento mítico cosmogónico importante. Se cree que es
una reinterpretación de cómo Huitzilopochtli, la principal deidad de los
mexicas, había matado a su hermana Coyolxauhqui a la que tiró por la ladera de
la montaña Coatépec donde quedó desmembrada. Seguidamente, Huitzilopochtli
cogió la cabeza de su hermana y la arrojó al cielo convirtiéndola así en regidora
de la luna y como consecuencia, él se proclamó regidor del sol por lo que la
pelota de hule personificaría ese sol.
Con el paso del tiempo este juego
deja de ser un juego meramente religioso adquiriendo un componente profano, por
lo tanto comienza a ser un juego lúdico.
¿Sabías cuál era la finalidad del juego de pelota?
Autora| Rosa
Mª Huertas Franco
Imagen| Blog
de culturas prehispánicas
Comentarios