El agua, en Roma,
primero fue distribuida a través de tubos de terracota o de madera y luego de
plomo
Tuberías romanas en el puerto de Ostia |
En tiempos de la
antigua Roma, la tubería de agua o fistula aquaria,
en latín, era el conducto, de diversos materiales, que se usaba en la red de
abastecimiento de agua potable en las ciudades. Estos tubos solían llevar el
fluido elemento desde los embalses, las cisternas o los acueductos hasta
los edificios públicos, tales como las termas, las fuentes o, en ciertos
casos, las casas de las familias más poderosas o las construcciones militares,
como la fortaleza legionaria romana de Chester (Britania) de mitad del siglo
III d.C.
Se ha analizado y
datado los núcleos de sedimentos de más de 170 sitios
En este sentido, según
un informe de Phys.org, un equipo de científicos, dirigido por Hugo Delile, del
Centro Nacional de Investigación Científica de Francia, ha analizado y datado
los núcleos de sedimentos de más de 170 sitios, en los puertos
de Ostia y Portus, con el fin de hallar la cantidad de plomo que se
encontraba en el sistema de agua en los tiempos de la antigua Roma.
Según los análisis, el
agua llevada a Roma a través de los acueductos, primero fue distribuida a través
de tubos de terracota o de madera. Sin embargo, se comprueba que los
niveles de plomo que se encuentran en los sedimentos aumentaron entre
los años 200 a.C. y 250 d.C. Esto indica que las tuberías de plomo se usaron
probablemente durante este período que, por tanto, comienza unos 150
años antes de lo que se había pensado anteriormente.
Los niveles de
plomo disminuyeron durante el período Imperial
El estudio también
sugiere que los niveles de plomo disminuyeron durante el período
Imperial, tal vez porque el sistema extensivo de plomería no se mantuvo
durante las guerras civiles.
La importancia de las
fístulas es la presencia en ellas de un sello o una inscripción con
un nombre o un patronímico, que proporciona información básica sobre su
fabricante y propietario, aunque a veces aparece el propio emperador reinante
como la autoridad suprema. Según algunos estudiosos, lo que se muestra es el
nombre del comprador, pero según otros se trata del nombre del
fabricante de las tuberías del edificio en cuestión. Las
inscripciones se hacían con plomo fundido sobre la superficie de la fístula,
dejando impresa la marca del fabricante con las letras en relieve.
En muchos casos, para
concluir, sirve para identificar el número de miembros de las villas romanas,
como la Villa de los Quintili, en la Vía Apia, cuyas fístulas
llevan el nombre de los hermanos Quintilii sobreimpreso.
Autor| José
Antonio Cabezas Vigara
Comentarios