El MUSAC de León acoge la
primera exposición en España de este artista holandés, que pretende ayudar a
salvar la brecha que separa al hombre de su entorno
Imagen de herman de vries con su "ambulo ergo sum" |
El MUSAC
de León acoge la primera exposición en España del artista herman
de vries, titulada "chance&change", concebida
específicamente para este espacio. Se trata de una especie de retrospectiva que
abarca desde sus primeras obras, en los años 60, hasta la actualidad.
La
muestra podrá verse desde el 17 de junio de 2017
al 4 de febrero de 2018 en la Sala 2. Kristine Guzmán es la comisaria, y su
definición del artista es sencilla y clarificadora "es un sabio", y Raquel
Álvarez la encargada de las labores de coordinación.
herman
de vries (él mismo decide escribir su nombre en
minúscula en un intento de huir de las jerarquías) es un artista holandés,
nacido en Alkmaar, Países Bajos, en 1931. Se formó como horticultor y
científico natural, de hecho, trabajó 16 años como biólogo en el Instituto
de Investigaciones Biológicas Aplicadas en la Naturaleza en Arhem.
Artista
global es un ejemplo de como vida, naturaleza y
arte pueden fundirse para transmitir un mensaje a toda la humanidad.
Delicadeza, sensibilidad, percepción son palabras que pueden definir la obra de
este artista que busca invitar al hombre a redescubrir su unión con la
Naturaleza a través de la mirada sensible a su entorno.
de
vries inició su camino como dibujante y pintor
allá por los años 50 del siglo pasado. Sus primeras obras y esculturas blancas
fueron calificades como "arte informal" por el propio artista,
debido a su ausencia de color y figuración. En estos primeros momentos se
decidió a estudiar el Azar como principio constituyente de orden y se
adscribió al movimiento artístico ZERO. De hecho, editó junto a Armand y
Henk Peeters en 1961 la revista null=0.
A
partir de 1964 empezó a preocuparse por la relación de la humanidad con la
naturaleza, hecho que no ha dejado de reflejarse en su obra. En 1975, da un
paso más en esta dirección, al decidir que los fenómenos y procesos de la
naturaleza constituyen la obra de arte física y autónoma y que él como artista
debe representarla tal cual.
Su
trabajo se expone en numerosas colecciones museísticas de todo el mundo, además
de realizar exposiciones como la que podemos ver en el MUSAC.
Desarrolla
su trabajo en el pueblo de Eschenau, en el que decidió quedarse a vivir
al pasar por allí en el transcurso de un viaje a Irlanda, la proximidad y la
belleza del bosque de Steigerwald fueron las que le convencieron.
En su
concepto de arte tienen especial relevancia la influencia que en de vries
ejercen las ideas del budismo Mahaya, el taoismo y el zen. De manera que
busca crear obras carentes de significado, hallando plenitud en el vacío y
elocuencia en el silencio pero sin negar la materia. A pesar de su formación
científica, de vries dirige su mirada a la naturaleza con la
simplicidad que refleja en sus poemas, buscando en sus recorridos "la
poesía del momento", "la oportunidad visual".
Mantiene
que la naturaleza es el mejor motivo en sí misma, sus
fenómenos y cambios constituyen la obra de arte en sí misma. El artista
moderno debe contribuir a curar la brecha existente entre el hombre y su
entorno, utilizando el conocimiento y las posibilidades técnicas de maneras
diversas.
De
la idea del azar, de vries avanzó a la de casualidad, para él la
casualidad no puede existir sin el cambio, y el cambio es una constante en
la naturaleza. El cambio crea oportunidades, nada es permanente todo
evoluciona, de ahí surge su lema "chance y change" que
resume las dinámicas de la realidad.
Oponiéndose
a Descartes, el filósofo del s. XVII Pierre Gassendi formuló el lema
"ambulo ergo sum" (camino luego existo), lema que de
vries ha hecho suyo. A sus 81 años, de vries camina todos los días unas
dos horas por el bosque, en su peculiar forma de meditación que le permite
encontrar elementos que llaman su atención y constituyen en definitiva la esencia
de su arte.
Autora| Ana Rebón Fernández
Vía| hernan de vries
Imagen| Wikipedia
Comentarios