En 1945, un labrador descubre casualmente cerca de la
ciudad egipcia de Nag Hammadi diversos papiros, ¿qué contenían?
En
1945, un labrador descubre casualmente cerca de la ciudad egipcia de Nag
Hammadi, a seiscientos kilómetros al sur de El Cairo, diversos papiros con
cuarenta y cinco textos cristianos. Se trata de transcripciones en lengua copta
que datan del siglo IV d.C., aunque las obras originales se remontan a varios
siglos atrás.
Estos
evangelios apócrifos (“apócrifo” quiere decir “secreto”) tienen un carácter
heterogéneo, pero casi todos presentan a Jesús desde la perspectiva de un
movimiento sectario llamado “gnosticismo”.
Los
escritos son posteriores a los evangelios de Marcos, Mateo y Lucas, y para
algunos especialistas no aportan ningún dato fiable que complete la información
de los evangelios oficiales. En todo caso, el único evangelio apócrifo que
merece una cuidadosa atención es el llamado Evangelio de Tomás, algo más fiable.
Autor| José Antonio Cabezas Vigara
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Wikipedia
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