Nociones
básicas para conocer e identificar la moneda Ibérico-Púnica
Hemidracma de Gadir, último tercio del s. III a. C. Anverso: cabeza de Melqart a izquierda con piel de león. Clava sobre hombro derecho. Reverso: atún a derecha; encima: MHLM; debajo: GDR |
La Numismática
es la disciplina que se encarga del estudio de monedas y medallas, con especial hincapié en las antiguas. Su atractivo es muy alto para
propios y extraños, y no sólo los especialistas en la materia o en ciencias
relacionadas suelen fijar sus objetivos en ella.
El coleccionismo
está a la orden del día y el contrabando,
por desgracia, también. Esto entra en conflicto con el valor histórico y numismático que aportan las monedas, ya que
muchas de ellas se pierden en el mercado
negro o en las subastas sin
poder llegar a las manos de estudiosos que aporten su validez patrimonial a la
Historia. Sí que es cierto que la acuñación de monedas se hacía en grandes
cantidades y normalmente, monedas que circulan en las ventas privadas ya están estudiadas con otros ejemplares
hallados previamente, pero, ¿y si no es así? El debate, desde luego, está servido.
Independientemente de la polémica, la
Numismática Antigua que más se estudia en España
responde a la siguiente división:
- Moneda
Ibérico-Púnica, cuyas acuñaciones se dieron en la Península entre los años
300 y 202 a. C.
- Moneda
Republicana, desde el siglo III hasta el 44 a. C.
- Moneda
Hispano-Latina, entre las muertes de Julio César en el año
44 a. C. y del emperador Claudio en el 54 d. C.
- Moneda
Imperial, coincidiendo en el tiempo con la Hispano-Latina desde
que Augusto fuese nombrado imperator
por el Senado en el año 31 a. C. Las reformas que Augusto introdujo en el campo
monetario se mantuvieron, con algunas modificaciones, hasta el siglo III d. C.
La
moneda Ibérico-Púnica
Las emisiones de este tipo de moneda
están asociadas a las cecas que se
encuentran en el sur peninsular
relacionadas con colonias feno-púnicas,
siendo fácil su detección por las leyendas
que aparecen en lenguas fenicia, púnica o neo-púnica, a excepción de Baria, que es anepígrafa.
La cronología
acertada para estas acuñaciones se sitúa durante la ocupación cartaginesa de la Península Ibérica entre los años 300 y 202 a. C., siendo el límite
inferior la derrota del bando
cartaginés en la Segunda Guerra Púnica,
hecho que les obligó a abandonar la
Península o a someterse a la romanización,
y por tanto, a cesar las acuñaciones monetarias propias.
En cuanto a las cecas más importantes detectadas de este período destacan Gadir,
Malaka, Sexi, Abdera, Baria (todas ellas en el Sur Peninsular) y la
isla de Ebussus.
Es complicado establecer unos patrones determinados para estas emisiones,
pues sus características aparecen regionalizadas
según la ceca de acuñación. Emitían monedas sobre cobre, bronce, oro y plata,
aunque estos dos últimos metales fueron más exclusivos y comprendidos en un
período de tiempo concreto, 237 – 206 a. C., coincidiendo con la presencia de la
familia Barca.
Las primeras
cecas en acuñar moneda y por tanto, las que mayor continuidad temporal
mantuvieron fueron las de Gadir y Ebussus, siendo
característicos sus símbolos de los dioses Melqart o Bes en los
anversos e insertando iconografía marina
en los reversos; sin embargo las acuñaciones monetales aumentaron con la presencia Bárquida y la Segunda Guerra Púnica
para satisfacer los gastos de la contienda
en armamento militar, equipación y para pagar a las tropas, apareciendo así
nuevos puntos de acuñación que se convirtieron en enclaves importantes para
esta tarea: Gadir, Malaka, Sexi, Baria
y Abdera.
Finalizado el evento bélico estas cecas no dejaron de emitir, siguiendo en
numerosas ocasiones con las características
e imágenes propias fenicias o púnicas como la figura del Pegaso, dos atunes como elemento de
una vida eminentemente marítima, antorchas, pulpos, moscas, etc. La verdadera
modificación sustancial en este tipo de acuñaciones fue el cambio progresivo que
sufrió hasta ser definitivamente absorbido
por el sistema de pesos romano.
Autora| Laura
Pellicer Martínez
Vía|
Tesorillo
Imagen|
Moneda Hispánica
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