Situación actual del movimiento social
que lucha por la igualdad entre hombres y mujeres
Icónica imagen del feminismo adoptada en los Ochenta, aunque fue creada en 1943 como propaganda de guerra en EEUU |
Muy
largo es el camino recorrido que respalda los movimientos feministas alrededor del mundo. Aunque existen estudios
que demuestran actitudes progresistas y emancipadoras de mujeres ya en la Edad Media (véanse los ejemplos de
Christine de Pizan, de Guillermine de Bohemia o de las beguinas), el movimiento
feminista tuvo su punto de partida “oficial” tras la Revolución Francesa y las vindicaciones sufragistas en diferentes puntos del planeta a lo largo del siglo XIX.
Desde
entonces, las distintas oleadas feministas han ido reclamando derechos sociales, laborales y jurídicos antes
impensables para las mujeres, y figuras tan importantes como Olimpia de Gouges,
Mary Wollstonecraft, Simone de Beauvoir o Clara Campoamor han pasado a la
historia por ser personalidades que rompieron los esquemas del patriarcado tradicional proclamando sus
ideales, con el objetivo de remover los cimientos de lo socialmente aceptado y
otorgar, cada vez más, importancia y
visibilidad a las mujeres.
Los
frutos fueron obteniéndose, sobre todo, a lo largo del siglo XX y sus logros son conocidos por la población, pero en este
punto cabe hacerse una pregunta, ¿se ha
logrado todo en materia de feminismo? La respuesta evidente a todas las
miradas es no.
Definición de feminismo
Uno
de los mayores problemas que
enfrenta el feminismo hoy día radica en su propia definición, muy manipulada
y libremente interpretada de manera intencional. Hay quienes quieren definirla
como una ideología y otros como un movimiento; también los hay que hablan de
feminismo en detrimento de los hombres y quienes defienden que el feminismo sólo
puede tener cabida entre las mujeres; y yendo más allá, hay quienes definen
feminismo como lo contrario al machismo.
Si
atendemos a lo recogido en la Real Academia Española, feminismo es la
“ideología que defiende que las mujeres deben tener los mismos derechos que los
hombres”. Pero siendo esta una definición demasiado simplista, la que plasmó la
escritora, psicóloga y activista política feminista Victoria Sau Sánchez en su monografía Diccionario ideológico feminista (1981) corresponde a una
aclaración más exhaustiva:
“El feminismo, es un movimiento social y
político que se inicia formalmente a finales del siglo XVIII -aunque sin adoptar todavía esta denominación- y que
supone la toma de conciencia de las
mujeres como grupo o colectivo humano, de la opresión, dominación, y
explotación de que ha sido y son objeto por parte del colectivo de los varones
en el seno del patriarcado bajo sus
distintas fases históricas de modelo de producción, lo cual las mueve a la
acción para la liberación de su sexo
con todas las transformaciones de la
sociedad que aquélla requiera.”
¿Nuevos retos o retos actualizados?
En
el siglo XXI todo es altamente moderno
gracias a los continuos avances en la ciencia que hacen que nuestras vidas sean
cada vez más y más cómodas. El pensamiento
también ha evolucionado a nuevos estadios de apertura ética y moral, donde antiguos aranceles mentales
conformistas han ido aboliéndose en pos de una mejor convivencia y paz social, sin embargo, no es oro todo lo que
reluce.
Las
luchas feministas siguen al pie del cañón ya que no se han conseguido todos los
logros deseados. Aparentemente, existe una igualdad
visible entre hombres y mujeres (en los países de la cultura occidental) ya
que ambos estudian en las mismas
universidades, tienen derecho al voto
en elecciones democráticas, acceso al mercado
laboral, mismos derechos
jurídicos… Pero aquí no termina la vindicación de igualdad entre hombres y
mujeres.
La
violencia de género sigue siendo uno
de los mayores indicadores que demuestran que el feminismo aún tiene un largo
camino que recorrer luchando. Las cifras son abrumadoras, además de un claro
reflejo de la anquilosada tradición
patriarcal que impera en nuestras sociedades aparentemente progresistas; la
brecha salarial entre ambos sexos
existe y parece que los puestos más
altos en las jerarquías empresariales están reservados, todavía, a hombres
con el mismo currículo que las mujeres.
Sin
embargo, donde existen verdaderos problemas de indefensión de las mujeres no es en los países occidentales, sino en
países en vías de desarrollo y
subdesarrollados. Mutilaciones genitales, violaciones, compra-venta de
niñas, matrimonios forzosos, analfabetismo, pobreza… Todo esto unido a la invisibilidad por parte de las
instituciones y de los medios y multiplicado por la impunidad de la que goza el sector masculino en estos países.
El
feminismo en el siglo XXI tiene un papel fundamental en materia de derechos humanos e igualdad entre ambos
sexos, y el largo camino recorrido (y ganado) hasta ahora sirve como motivación para aunar esfuerzos por
parte de toda la sociedad para frenar, de una vez por todas, todos los males
que del patriarcado como sistema y del machismo como su brazo ejecutor se
derivan.
Autora|
Laura
Pellicer Martínez
Vía|
Mujeres en Red
Imagen|
Serielizados
Comentarios